“Son las relaciones con los demás las que rompen
nuestros espíritus y nuestra conexión con nuestros cuerpos.
Son las relaciones con los demás las que las curan”
(Hilton, 1988/89).
nuestros espíritus y nuestra conexión con nuestros cuerpos.
Son las relaciones con los demás las que las curan”
(Hilton, 1988/89).