29 de agosto de 2025

La vuelta al trabajo tras las vacaciones: una oportunidad para reconectar contigo







Las vacaciones nos permiten parar, respirar y reconectar con lo esencial. Pero cuando llega el momento de volver al trabajo, muchas personas experimentan una mezcla de emociones: cansancio, desmotivación, ansiedad o incluso tristeza. 

¿Y si ese malestar fuera una invitación a escucharte más profundamente?


Algunas preguntas que pueden ayudarte a decidir

  •  ¿Cómo me siento al volver al trabajo?
  •  ¿Qué emociones aparecen con más frecuencia en estos días?
  •  ¿Estoy escuchando lo que mi cuerpo me dice?
  •  ¿Qué me gustaría cambiar o mejorar en mi vida cotidiana?
  •  ¿Estoy preparada/o para regalarme un espacio para mí?

El cuerpo también regresa al trabajo

Volver al trabajo no solo implica retomar tareas, reuniones y horarios. También significa que nuestro cuerpo vuelve a adaptarse a un ritmo que, en muchas ocasiones, no es natural ni amable. El estrés, la tensión muscular, los dolores de cabeza o de espalda, el insomnio… son señales que el cuerpo nos lanza para decirnos que algo no está del todo bien.

La psicoterapia psico-corporal parte de una premisa fundamental: el cuerpo guarda memorias, emociones y vivencias que muchas veces no pasan por la palabra. Por eso, en el espacio terapéutico, no solo trabajamos con lo que se dice, sino también con lo que se siente, se respira, se mueve y se expresa a través del cuerpo.

¿Por qué este momento puede ser ideal para comenzar terapia?

  1.  Mayor conciencia emocional: Las vacaciones nos permiten bajar el volumen del ruido externo y conectar con lo que realmente sentimos. Al volver, esa conciencia puede mantenerse activa y ayudarnos a identificar lo que no queremos seguir sosteniendo.

  2.  Contraste entre lo deseado y lo vivido: El regreso puede evidenciar un desajuste entre lo que anhelamos (más tiempo libre, bienestar, disfrute) y lo que efectivamente vivimos en el día a día. Ese contraste puede ser el motor para iniciar un cambio.

  3.  Inicio de ciclo: Aunque el año comienza en enero, muchas personas sienten que septiembre marca un nuevo comienzo. Es un buen momento para plantearse objetivos personales, entre ellos, el cuidado emocional. 

  4.  Prevención del desgaste: Empezar terapia antes de que el estrés se acumule puede ser una forma de prevenir el agotamiento emocional, el burnout o la desconexión interna.

¿Qué puede ofrecerte la psicoterapia psico-corporal en este proceso?

  • Un espacio seguro y cuidado para explorar tus emociones, tus tensiones y tus patrones de comportamiento.
  • Herramientas para reconectar con tu cuerpo, tu respiración y tu energía vital.
  • Acompañamiento empático y profesional para transitar momentos de cambio, crisis o simplemente para conocerte más profundamente.
  • Un enfoque integrador, que no separa mente y cuerpo, sino que los entiende como una unidad en constante diálogo.

Motivación para dar el primer paso

Sé que empezar terapia puede generar dudas, miedos o resistencias. Es normal. Pero también puede ser uno de los actos más amorosos que tengas contigo misma/o. No se trata de estar “mal” para buscar ayuda, sino de reconocer que mereces sentirte mejor, más conectada/o, más viva/o.

La psicoterapia no es un lugar de juicio, sino de encuentro. Un espacio donde puedes ser tú, con tus luces y tus sombras, con tus preguntas y tus certezas, con tu historia y tu presente. Y desde ahí, empezar a construir algo nuevo.


  •  Si algo de lo que has leído ha resonado contigo, quizás este sea el momento de iniciar un proceso terapéutico. Como psicoterapeuta psico-corporal, te ofrezco un espacio de escucha, cuidado y transformación.


 Puedes escribirme para más información o para agendar una primera sesión.